lunes, 30 de marzo de 2009

Huelga de metro en Madrid

Hoy tenemos huelga en el metro, que es el medio de transporte más razonable para moverse por esta ciudad. Muchos lo usamos para ir a trabajar o nuestras cosas cotidianas.
Se supone que los servicios mínimos durante la hora punta de uso estaban al 50% de la frecuencia de trenes habitual, que en esa hora no suele sobrepasar de los 3 minutos. No ha sido así, ya que los trenes han pasado con una frecuencia de cada 10-15 minutos (no salen las cuentas, por lo tanto) e iban despacito, muy despacito.
Cuando hemos ido a pedir un justificante del retraso en la taquilla a la salida, nos dice la taquillera que no nos lo dan, porque no ha habido incidencias: los trenes han funcionado y que cómo la huelga estaba avisada y publicada, lo que teníamos que haber hecho era madrugar más para haber llegado antes.
Y se ha quedao tan ancha...

miércoles, 25 de marzo de 2009

Voces

La voz humana es el primer instrumento musical, dicen...

El cantante principal es Abderrahim Abdelmoumen y trabaja en el Grupo Larbi Temsamani de Tetuán.


AbdeRrahim ABDELMOUMEN ''Dikr Wa Samaa Soufi... por mou-sab

AbdeRrahim ABDELMOUMEN ''Dikr Wa Samaa Soufi... por mou-sab

Recomiendo empezar por el segundo...

domingo, 22 de marzo de 2009

Alas de Isis

Ver una actuación de una bailarina con las alas de Isis siempre es fascinante, sobre todo teniendo en cuenta que es bastante complicado conseguir mover con una mínima gracia semejante artilugio y cualquier desequilibrio -por mínimo que sea- entre un brazo y otro, queda bien patente al reflejarse en el movimiento de las alas.

No es nada infrecuente poder observar qué lado del cuerpo tiene más desarrollado una bailarina fijándose en el modo en que se mueven las alas: al hacer los movimientos en hélice o al agitarlas como una especie de vibración se dibuja mejor el movimiento del lado dominante, mientras que el del otro a veces queda el ala un poco perjudicada...

Me ha sorprendido encontrar filmaciones bastante antiguas del uso de las alas, que en su momento se consideró algo totalmente experimental. No tengo ni idea de cómo llegan a la danza oriental, imagino que una bailarina espabilada se dió cuenta del potencial escénico del movimiento de las alas. De hecho, hace poco se pudo ver a un bailarín que las llevaba en un programa de televisión, acompañando a un grupo (no recuerdo cual).

Me parecía buena idea poner una comparación entre una actuación contemporánea y una de finales del siglo XIX (si queréis ver más, hay que buscar serpentine dance y por favor, tened en cuenta que las grabaciones antiguas necesariamente se ven con más fotogramas por segundo que las actuales). Aquí está:

jueves, 12 de marzo de 2009

Violencia gratuíta

Ayer por la tarde, a eso de las 16'30 horas viví la siguiente situación en un autobús de la EMT de Madrid, línea 21, justo en la esquina de la calles de Alberto Aguilera con la de la Princesa, famosa desde que en el año 2001 se derrumbó una casa mientras estaban haciendo unas obras poco claras en ella:

Acaba de subirme en la parada que hay frente a la Librería Páez (toda una institución en el barrio). A unos 100 metros de esa parada está la esquina citada y por este motivo el autobús debe cruzarse en diagonal en tan poco espacio y situarse en el carril izquierdo de la calle Alberto Aguilera (que tiene tres carriles en cada sentido), para poder seguir su camino hacía la calle de Marqués de Urquijo, mientras que los coches que giran a la derecha, hacia Princesa, se suelen poner en los carriles central y derecho.

Al llegar al punto justo del cruce, el autobús se situó en el carril central, quedando en el izquierdo un coche pequeñito. Se pone en verde el semáforo y el bus salió hacia adelante (claro, es lo que tiene que hacer) mientras que el coche pequeñito giró a la derecha para tomar la calle Princesa, de manera totalmente inesperada e inapropiada ciertamente.

De tal maniobra resultó que autobús y coche casi chocan, quedando el cochecito parado justo en la parte donde se sienta el conductor del bus. Éste intentó seguir su camino, pero no podía avanzar sin llevarse por delante al cochecito, de modo que, sin más, abrió su ventanilla y gritando de manera desaforada, absolutamente fuera de sí, se puso a dar puñetazos sobre el techo del cochecito, como un poseído.

Las cuatro o cinco personas que íbamos de pasajeros no dábamos crédito a lo que estabamos viendo.

Yo miré hacia quién conducía el cochecito y resultó ser una mujer mayor, que estaba absolutamente bloqueada, aterrorizada más bien, mientras que el conductor del bus seguía con su violencia y sus gritos. Nadie decía nada, yo misma no fui capaz nada más que de decirle un poco por lo bajinis si deja de gritarle a lo mejor reacciona... Pero con muy poca convicción, porque también estaba yo un poco temerosa ante la actitud del menda este.

A todo esto ya se estaba formando un atasco monumental a nuestro alrededor, porque en ese cruce confluyen 12 carriles de tráfico muy intenso a cualquier hora del día, es una zona comercial y próxima a un campus universitario, un intercambiador de autobuses y el comienzo de una utilizadísima carretera hacia la periferia madrileña. O sea, que ni el cochecito ni el autobús tenían espacio suficiente para maniobrar y desconverger sus trayectorias.

Mientras tanto, el conductor seguía con su gritos y los golpes...

Finalmente la conductora del cochecito consiguió reaccionar, pudo separarse del autobús y avanzó hacia adelante, por la calle del Marqués de Urquijo, que era la única trayectoria posible para ella.

El conductor del bus también arrancó, aún con sus improperios y salió detrás, no despacito precisamente. Todos los viajeros nos bajamos en la primera parada que venía, sin decir ni pio, pero obviamente impresionados por lo que acababa de pasar.

Me pregunto las siguientes cuestiones:
  • ¿Hay algún procedimiento para poder denunciar una situación así? Las normas de viajeros no indican nada al respecto, sólo hablan de los deberes que tenemos que cumplir.

  • ¿En qué modo influyó el hecho de que fuera una mujer y mayor quien conducía el cochecito?
    ¿Fue por eso por lo que se pusó tan bestia el conductor del bus?
    ¿O tal vez si hubiera sido un hombre habrían llegado a las manos o algo peor?
    ¿Si hubiese sido un hombre joven, con un buen coche y más rápido de reflejos su maniobra hubiese despertado admiración en el conductor, esa del tipo mira que tío, lo que puede hacer con ese coche que lleva...?

  • ¿Alguien se ha visto en una semejante? ¿Qué hizo la gente en esos casos?
Yo me siento incómoda conmigo misma por no haberme puesto más firme con el conductor, pero por otro lado, ¿quién me asegura que el tipo en cuestión no me hubiese golpeado a mí, o a cualquiera de los pasajeros, con la misma violencia que se puso a golpear al cochecito? ¿Más violencia aún...?

jueves, 5 de marzo de 2009

En honor a Charles Darwin y la selección natural...

Muchas de las personas que me acompañan tanto en el trabajo como en las clases de danza se están planteando aquello de transmisión de los genes... Aquí os dejo algunos consejillos para ir entrenando:

1) Para vivir la experiencia del embarazo: cuélguese una bolsa de garbanzos a la altura de la barriga, agregando un puñado todos los días durante nueve meses. Pasados los nueve meses, abra la bolsa y retire el 10% de los garbanzos.

2) Antes de lanzarse a tener hijos, busque una pareja que ya los tenga y sométalos a estudio. Critique sus métodos para imponer disciplina, su falta de paciencia, sus pésimos niveles de tolerancia y por haber permitido que sus hijos se porten como salvajes. Sugiera maneras de mejorar el comportamiento de los niños a la hora de acostarse, ir a hacer pis o comer. Aproveche, será la última vez que tendrá todas las respuestas.

3) Para hacerse una IDEA de cómo serán las noches, consiga un almohadón húmedo de entre 4 y 6 kilos y recorra el salón llevándolo en brazos, sin sentarse, desde las 5 de la tarde hasta las 10 de la noche. A las 10 suelte el almohadón, ponga el despertador para que suene a las 12 y duerma. Cuando a las 12 suene el despertador, levántese y vuelva a pasear el almohadón por el salón mientras canta canciones de cuna en la oscuridad. Repetir a las 2 AM a las 4 AM y a las 6 AM. Opcional: a las 4 AM puede dar una vuelta en coche con el almohadón. Siga esta rutina durante 5 años. Ponga siempre buena cara.

4) ¿Es posible aguantar a los niños dentro de casa? Para averiguarlo, unte Nocilla en el sofá y mermelada en las cortinas. Esconda un trozo de pescado rebozado detrás del equipo de música y déjelo ahí durante todo el verano. Meta los dedos en las macetas y luego arrástrelos por las paredes más visibles. Dibuje encima de las manchas con lápices de color. Compre 5 cachorritos de doberman y déjelos retozar en su dormitorio.

5) Vestir a un niño pequeño es simple: primero, compre un pulpo, pídale al verdulero una bolsa de red y trate de introducir el pulpo dentro de la bolsa de manera que no salga ninguno de los tentáculos por los agujeros de la red. No se aflija, le puede dedicar toda la mañana.

6) Niños en edad escolar: guarde una caja de huevos (vacía). Usando una tijera y unos rotuladores, conviértala en un gracioso cocodrilo. Ahora junte un envase tetra-brik, una pelota de ping-pong y un paquete de cereales vacío y construya una réplica exacta de la Torre Eiffel. Comience este trabajo a las 11 de la noche, que sería la hora en la que se entera que ES PARA MAÑANA. ¡Excelente! Ahora espere las críticas de la maestra.

7) Cambie el coche de dos puertas por una camioneta. Y no la lave nunca más. Después de todo, es un auto familiar, sin valor de reventa. Compre un helado de chocolate y aplástelo en la guantera. Meta dos monedas de 10 cts. en el lector de CDs, tambien vale la cáscara de un plátano. Compre un paquete familiar de galletitas dulces. Macháquelas un buen rato sobre los asientos traseros. Salga del coche, y arañe ambos lados del vehículo con la llave. ¡Perfecto!

6) Vaya al supermercado. Lleve consigo lo más parecido que encuentre a un niño de menos de cuatro años (una cabra adulta es ideal). Si piensa tener más de un hijo, lleve dos cabras sueltas. Haga la compra para una semana sin perder de vista las cabras. Mantenga discusiones con los encargados de seguridad del super, subiendo en el escalafón (pero siempre sin perder de vista a las cabras). Cuando llegue al gerente, cambie de supermercado.

9) Darle de comer a un niño: compre un melón, vacíelo y hágale un pequeño agujero en un costado. Cuélguelo del techo y déle un golpe para que se balancee. Ahora tome un plato con puré de verduras. Trate de meter cucharadas de puré dentro del melón, mientras simula ser un avión. Siga intentándolo hasta terminar la mitad del puré. El resto, viértalo sobre su regazo y desparrame bastante en el suelo.

10) El aseo de la criatura: consiga un gato adulto (preferentemente callejero o semisalvaje). Póngase su mejor traje si es hombre o medias y zapatos de tacón alto si es mujer. Llene la bañera con agua tibia y juguetes de goma. Acto seguido introduzca el gato y lávelo con champú.. luego de enjuagarlo y secarlo con una toalla, siga el procedimiento indicado previamente con el pulpo y la bolsa de red. Repetir todas las noches durante 5 años.

Si lográis superar estos pasos, adelante, podéis tener hijos ya. El resto es lo mejor que os podrá pasar en vuestra vida.