Ayer, a esa hora en la suele estar todo el mundo tirao en el sofá después de comer, hemos ido a ver la exposición Tesoros de las culturas del mundo en la sala de los antiguos depósitos de agua del CYII, en la Plaza de Castilla. Lo bueno de ir en ese momento es que estaba vacía, con lo cual el esfuerzo de salir corriendo sin cafelito merece mucho la pena.
Ahora bien, me ha sucedido lo mismo que al ver la exposición de los Tesoros de la Hispanic Society, es decir, que he salido con un cabreo bastante serio, ya que en su práctica totalidad las piezas proceden de descarados expolios del pasado. Esto puede comprobarse en las cartelas de las vitrinas facilmente. Para no ser categórica, diré que el 99% de ellas no tienen una procedencia bien documentada, con lo que eso significa.
Algunas de las piezas expuestas son realmente sobresalientes, como la fíbula Braganza o un espectacular bifaz de Olduvai tallado en cuarzo (en mi modo de ver, la pieza más bonita de toda la exposición).
No hay un hilo argumental, excepto el cronológico y la colección está expuesta bajo un amplio criterio geográfico, divididas según su procedencia continental. La exposición merece la pena, sin duda, aunque hay dos gazapos expositivos muy significativos:
Aún así, conviene visitarla, porque hay también piezas que no es frecuente poder ver, como las de arte plumario o piezas de Oceanía.
Ahora bien, me ha sucedido lo mismo que al ver la exposición de los Tesoros de la Hispanic Society, es decir, que he salido con un cabreo bastante serio, ya que en su práctica totalidad las piezas proceden de descarados expolios del pasado. Esto puede comprobarse en las cartelas de las vitrinas facilmente. Para no ser categórica, diré que el 99% de ellas no tienen una procedencia bien documentada, con lo que eso significa.
Algunas de las piezas expuestas son realmente sobresalientes, como la fíbula Braganza o un espectacular bifaz de Olduvai tallado en cuarzo (en mi modo de ver, la pieza más bonita de toda la exposición).
No hay un hilo argumental, excepto el cronológico y la colección está expuesta bajo un amplio criterio geográfico, divididas según su procedencia continental. La exposición merece la pena, sin duda, aunque hay dos gazapos expositivos muy significativos:
- El primero de ellos es la clasificación de un ara funeraria cartaginesa, con el símbolo de la diosa Tanit y que claramente dice procedente de Cartago, pero situada en la sección de Próximo Oriente, junto a las culturas sumeria y acadia. ¡¿?!
- El segundo es que en una vitrina de exposición de monedas, se quedan tan anchos cuando en la descripción de dos de ellas ponen CERCA DE. Joer, que ésa es una metedura de pata gorda, que las monedas tienen CECA, es decir, lugar dónde se ha acuñado la moneda.
Aún así, conviene visitarla, porque hay también piezas que no es frecuente poder ver, como las de arte plumario o piezas de Oceanía.