Sibila Nur ha colgado esta oración y me parece que, independientemente del caracter religioso, dice cosas muy sensatas.
(Aquí poner la deidad que proceda) no permitas que yo me olvide de aquella que me enseñó, para que un dia mis alumnas tampoco me olviden.
Impide que la vanidad extrema se apodere de mí, como si mi ropa lujuosa ya hiciese de mi una bailarina.
No me dejes olvidar que sin humildad es imposible aprender.
Que yo no entre en disputas queriendo probar quien es la mejor, pues siempre habrá alguien que sepa mas que yo.
Que la arrogancia no se instale em mi alma y que yo nunca trate a alguien como si no fuera nadie.
Que yo sepa ser generosa con aquellas que nada o poco saben.
Que mi boca se cierre antes que yo destile veneno sobre la danza de otra bailarina, para que un día este veneno no caiga en mi también.
Y que yo nunca me olvide al bailar, de que ninguna bailarina posee gracia y ligereza, si su corazón es de piedra.
Pues la bailarina baila con su corazón.
Es precioso Marta
ResponderEliminarUn abrazo
Pues sí y además dice grandes verdades.
ResponderEliminarPor favor ¿ Podría copiarla?
ResponderEliminarMe gustaría en un momento dado ponerla en mi blog.
Gracias
Claro que puedes, es más, creo que es muy conveniente que se difunda, para que todo el mundo pueda enterarse de lo que dice.
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